Agentes de la Policía Local de Málaga han desalojado un local clandestino en el que se realizaban partidas ilegales de cartas en las que se apostaba con dinero, entre otras irregularidades.
La investigación fue iniciada por agentes especializados en la investigación en redes sociales y fuentes abiertas de internet tras la captura de contenidos audiovisuales en los que pudieron apreciar como en un local clandestino, cuya ubicación en un principio se desconocía, se estaban llevando a cabo timbas ilegales con apuestas, teniendo apariencia algunos de los participantes de ser menores de edad. Además, tampoco se tenían en cuenta las medidas preventivas frente al COVID-19, siendo igualmente usual el consumo de tabaco y cachimbas.
Tras varias indagaciones, los policías locales terminaron descubriendo la ubicación exacta del local, al que denominaban Tetería Narcos, sito en la barriada Palma-Palmilla, comenzando agentes del Grupo de Investigación y Protección (GIP) de la Policía Local de Málaga, que prestan su servicio de paisano, a realizar un sigiloso seguimiento y vigilancia del mismo, pudiendo comprobar como los jóvenes que llegaban avisaban vía teléfono móvil para que les abrieran desde dentro la corredera y poder así acceder al interior.
El pasado domingo 10 de octubre, policías locales tanto de paisano como uniformados entraron en el local para inspeccionar el mismo, comprobando que en el interior había un total de trece jóvenes con edades comprendidas entre los 15 y los 23 años de edad, entre los que se encontraba el responsable del establecimiento, mientras los otro doce, de los que diez eran menores, estaban realizando apuestas en un juego de cartas.
Denuncias COVID y armas intervenidas a menores
Todos ellos fueron identificados y denunciados por incumplir las medidas preventivas frente al coronavirus, ya que no usaban mascarilla ni guardaban la distancia de seguridad. Además, los policías locales le localizaron a uno de los menores una navaja de unos ocho centímetros de hoja, siendo denunciado en acta de ocupación temporal de objetos peligrosos para la integridad de las personas y la seguridad pública, y a otro menor, una defensa extensible que trataba de ocultar, confeccionando igualmente la correspondiente acta de denuncia, siendo ambas armas intervenidas por los agentes.
Además, los policías locales remitieron cartas a los padres de los menores identificados en las que les informaban de los hechos, elevando asimismo informe a la Fiscalía de Menores.
Responsable denunciado por carecer de documentación, incumplir medidas COVID
En cuanto a la persona que estaba al frente del local fue igualmente identificado, siendo un joven de 23 años de edad que manifestó ser el responsable, así como que se trataba de un antiguo bar de su abuelo que fue cerrado años atrás, siendo denunciado por el incumplimiento de las medidas frente al COVID-19 tales como uso de mascarillas, distancia de seguridad o permitir fumar en cachimbas, además de por carecer de documentación para la actividad.
Asimismo, en el cacheo preventivo que le efectuaron, los policías locales le incautaron marihuana, por lo que fue propuesto para sanción por tenencia de sustancias estupefacientes.
En lo que respecta a la actividad de juego ilegal, los agentes le intervinieron 90 euros, dinero que supuestamente habría obtenido como fruto de la recaudación de entrada a la timba que se estaba celebrando, así como dos maletines de fichas y cartas de póker, siendo todo ello remitido al Servicio de Juegos y Espectáculos Públicos de la Junta de Andalucía. Igualmente, tras consulta elevada a dicho organismo, los policías locales procedieron al precintado de una máquina tipo B, coloquialmente denominada como tragaperras, que no contaba con ningún tipo de permiso, quedando a disposición del citado Servicio de la Junta.
Local desalojado y precintado
Finalmente, los policías locales procedieron al desalojo y precintado del establecimiento, quedando informado su responsable de la obligación de cesar la actividad, así como de las consecuencias que podría acarrear el hecho de reanudarla.