Según la investigación, la sospechosa accedía a tiendas y comercios de la localidad, simulando estar de compras, y seleccionaba a sus víctimas entre la propia clientela
Acto seguido, se aproximaba al objetivo disimuladamente y utilizaba como parapeto una bolsa de tela o alguna prenda para ocultar la maniobra delictiva
Así, la sospechosa conseguía apoderarse de carteras y otros efectos introduciendo la mano en los bolsos de las víctimas
La Policía Nacional ha detenido en Estepona a una mujer de 20 años por su presunta implicación en la comisión de cinco hurtos con el método de la ‘muleta’. Según la investigación, la sospechosa accedía a tiendas y comercios de la localidad, simulando estar de compras, y seleccionaba a sus víctimas entre la propia clientela. A continuación, se aproximaba a su objetivo, de manera disimulada, y utilizaba como parapeto una bolsa de tela o alguna prenda del mismo establecimiento para ocultar la maniobra delictiva. Finalmente, la joven conseguía apoderarse de carteras y otros efectos de valor, introduciendo la mano en los bolsos de las víctimas.
Las pesquisas, llevadas a cabo por agentes adscritos a la Brigada Local de Policía Judicial de la Comisaría de Estepona, permitieron detectar y detener a la investigada tras varias incursiones discretas en áreas comerciales de la localidad.
Los agentes mantuvieron contactos estrechos con los comerciantes locales en aras de conocer la existencia de carteristas e información de los hechos.
Precisamente, gracias a las averiguaciones, los investigadores identificaron y arrestaron a una joven de apenas 20 años a la que atribuyen, al menos, cinco delitos de hurto en establecimientos comerciales de Estepona.
Esta persona entraba en diferentes tiendas y comercios, fingía estar de compras y elegía a su víctima. Tras ello, realizaba la sustracción y desaparecía rápidamente del lugar antes de que el perjudicado se percatase de lo ocurrido.
Una técnica clásica, muy extendida entre los descuideros
La técnica de la ‘muleta’ es una maniobra muy extendida entre los descuideros -como se conoce en el argot policial a los autores de hurtos al descuido-. Esta modalidad consiste en emplear un objeto, como un periódico, un mapa, una bolsa o elemento similar, para ocultar con gran sutileza y habilidad la maniobra de sustracción. La víctima no suele darse cuenta hasta que el carterista ya está lejos con su botín.